Me licencié en Bellas Artes y tras finalizar mis estudios como escultora, me fui a Costa Rica a trabajar allí en un proyecto artístico en conjunto con la UCR.

La experiencia y la cultura me gustaron tanto que decidí quedarme.

Empecé a entablar contacto con muchos artesanos que trabajaban las piedras. Y ahí empezó la magia. Descubrí que podía hacer pequeñas joyas sin renunciar al trabajo escultórico, haciendo piezas únicas que otras personas podían llevar en su día a día.

Un proyecto de cinco meses se convirtió en un viaje de dos años por todo Centro América donde aprendí mucho sobre piedras y técnicas diferentes de como hacer joyas con pocas herramientas y recursos. Así nació Ónice, un proyecto nómada que me dio libertad y me enseño a vivir creando belleza.

Ahora resido en España, desde donde hago la labor creativa y hago los envíos.

Quiero invitarte a que descubras mi trabajo estés donde estés a través de esta web.